HOPE
A Hope (Esperanza), la
vida le había obsequiado con innumerables presentes, entre los más valiosos
estaban su familia y sus amigos que, a
lo largo de su recorrido, había ido atesorando.
Al despertar un día, descubrió, con gran sorpresa que estaba inmovilizada, unos
grilletes le impedían moverse. Necesitaba comprender lo que le estaba
ocurriendo, tenía que liberarse por sí
misma o ser liberada con ayuda de alguien. Aunque sí hubo quien lo
intentó, nadie podía socorrerla porque era inmaterial, su cuerpo era intangible.
Hope tendía sus brazos pero nadie se percataba de su presencia.
Finalmente tuvo una brillante idea. Decidió buscar
un cuerpo deshabitado y alojarse en uno nuevo en el que poder volver a ser Hope. Poder volver a ser libre e independiente. Realizar las actividades que ahora no podía hacer.
(....Don't panic! I like Happy Endings)
De forma inesperada ese momento llegó un amanecer, tal como ella deseaba desde hace tiempo al tener que afrontar un nuevo día.
5 comentarios:
¡Qué bonito, Rosa!
Thanks !
Hope ahora mismo tiene muchísimos adeptos en los que poder esperar el nuevo día. Deberíamos tener siempre a Hope con nosotros, codo con codo, una buena amiga. Beso Rosa.
¿Has leído la Mujer Habitada? Lo leí hace tiempo y me ha venido el recuerdo al leer en tu escrito la búsqueda de un cuerpo deshabitado. Conexión de ideas. Creo que lo volveré a leer porque no lo recuerdo bien pero me gustó.
Hope está en todos. Un abrazo.
Nuria.
Un cuento esperanzador y muy bonito
¿Cómo es eso de que no se te da bien escribir? Ya me gustaría a mí.
Besos,
Carmen
Precioso Rosa, muchas gracias. Hoy soñaré que me meto en el cuento de Alicia para salir convertido en despertador sobre las mesitas de noche de todos los Hope del mundo. Un beso
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