Contemplando una casa de indiano en Candelario
(Foto: JRT, 2013)
(Foto: JRT, 2013)
El viernes 10 de mayo nos marchamos a Candelario a pasar el fin de semana. Candelario es conocido, además de por lo bonito que es, por la calidad de los chorizos que allí se hacen, chorizos de los que se comen.
Viajamos desde Madrid a Ávila, de Ávila a Piedrahíta y después a Béjar para más tarde llegar a Candelario. Es un pueblo muy bonito y se ve que el ayuntamiento se preocupa de que no lo estropeen con nuevas construcciones. Además de bonito, es un tanto peculiar. Una de las peculiaridades son sus "batipuertas", que podéis ver en la foto a continuación.
Una de las típicas batipuertas de Candelario
(Foto: JRT, 2013)
Otra peculiaridad de candelario son las casas, generalmente construidas con piedra, excepto la planta de arriba que solía construirse con adobe. En la planta baja se tenía a los animales, lo que más había eran cerdos. En el primer piso habitaba la familia y la segunda planta se usaba como secadero de chorizos. Consistía en una amplia habitación con muchas ventanas asimétricas en las cuatro paredes, de tal forma que, dependidiendo de dónde soplara el viento, las abrían para provocar las corrientes necesarias para un mejor secado u "oreado" de la chacinería.
Otra peculiaridad de Candelario son las "regaderas", canalizaciones a lo largo de todas las calles del pueblo, es otra de las peculiariddes. Las regaderas servían para lavar la sangre que quedaba en las calles después de hacer las matanzas en la casas.
Fuente y regueras de Candelario
(Foto: JRT, 2013)