Vuelta a la normalidad

Al fin no nos marchamos a Málaga pero quedarse en Madrid ha estado muy bien. Ya sabéis que me encanta la lluvia. Estos días he disfrutado de lo lindo dando largos paseos por un Madrid sin gente apenas. Bueno, en el centro sí había batante. También mucha gente de la periferia de Madrid acude al centro para ver las procesiones. Aunque en Madrid no son muy conocidas porque, muchos madrileños se marchan fuera precisamente estos dìas para alejarse de la gran urbe e intentar empezar a disfrutar de la primavera, si el tiempo lo permite. El viernes estuvimos por calle Huertas y , aunque creímos que habría poca gente, nos sorprendio ver que, sí había bastante. Unos para ver procesines y mucho turismo español. Disfruté el paseo y aunque no tomé copita, lo disfrutè como si la hubiera tomado. Hoy domingo ha venido a verme mi compañero y además amigo, Martín R. y me ha llevado al Museo del Prado. Martin es para mí una persona muy especial además de brillante es casi un erudito. Lee liteatura clásica en alemán en Inglés sabe eusquera y es amigo mío. listo ?no? . Yo llevaba varios días queriendo ir a la tienda del museo del Prado para comprar unas postales. Martín me llevó. pagamos una entrada carísima y resulta que por la tarde era gratis. Dejémoslo en era el día en que yo quería hacer una donación al museo del Prado. Otro día del fin de semana vino Ana G, también amiga y compañera de escuela y departamento, a verme. Las visitas de Ana me gustan porque es muy tranquila. Hablamos de lo que está o estamos leyendo o de algo que hemos leido y recomendamos. Habla mos de viajes que hemos hecho y todo muy tranquilamente. Sin prisas.
También pasé una mañana estupenda en su compañia.